Fr. Vincent Bara

12 de mayo de 1938 – 24 de agosto de 2024
Provincia de Santo Tomás Apóstol, India

El Hno. Vincent Bara, de 86 años, nació en el seno de una familia católica muy piadosa y devota, el 12 de mayo de 1938 en el Mundaltoli de la parroquia de Rangari, diócesis de Ranchi, actualmente en la diócesis de Simdega. Era el menor de 4 hermanos y 3 hermanas del Sr. Theophil Bara y Paulia. Dos de sus hermanos eran jesuitas. Su deseo de seguir de cerca a Jesús le llevó a Gokhla para la formación inicial en la Orden y al Noviciado del Sagrado Corazón, Babumahal para su noviciado.  Profesó el 1 de septiembre de 1964. Tras completar su TTC en Nawatoli en 1971, comenzó su ministerio como profesor en la escuela Stannislaus de Gokhla. Más tarde, en los años 90, fue a Satali, al Mendabari de la parroquia de Hasimra, en Bengala Occidental. Trabajó en Agaiamore, Adhikari en la diócesis de Bagdogra, de nuevo en Gokhla, después a Kanjwe, Kattibari y por último a Assisi Bhavan, Ranitalab en marzo de 2018 para recibir tratamiento médico y descansar.

Su partida de este mundo fue impactante para nosotros. Estaba sano y saludable.  Rezaba regularmente y participaba en todas las actividades de la comunidad. Esa noche tomó su comida habitual y se retiró a su habitación deseando alegremente buenas noches a sus hermanos. El 24 de agosto de 2024, de madrugada, se durmió en el Señor debido a un paro cardíaco, dejándonos a todos conmocionados, sorprendidos y apenados. Más tarde, sus restos mortales fueron trasladados a la casa provincial y velados para que los demás pudieran ofrecer sus oraciones y homenajes.

La muerte del Hno. Vincent nos recuerda que el objetivo de la vida es conocer, amar y servir a Dios. Creemos que en la vida hay más de lo que se ve a simple vista. Con su muerte hemos perdido a uno de los pioneros de la Provincia que vivió como testimonio vivo de la vida franciscana sencilla. Era un estricto disciplinario en la escuela, un entrenador y amigo en el campo de fútbol, un buen profesor en el aula y un celoso misionero en bicicleta. Impresionaba a todos con su cálida sonrisa y su sencillez. Su fe inquebrantable, su lealtad, su amor al pueblo de Dios, a la Iglesia y a la Orden eran el sello de su personalidad. Un buen agricultor trabajador que se esforzaba físicamente por cultivar la tierra allá donde iba. Le echamos de menos. Celebró plenamente su vida. Vio el jubileo de diamante de su compromiso con el Señor. Ahora deja tras de sí un legado de oración, perseverancia, alegría seráfica y entrega total al Señor para que lo emulemos, como él está en la presencia de Dios.

El Reverendísimo Julius Marandi, Obispo de Dumka, fue el celebrante principal de la misa de resurrección, Fr. John Kochuchira predicó la homilía y Fr.. Kurian Thrikkodanmalil ofició el servicio fúnebre. Un gran número de sacerdotes, frailes, religiosos y sus allegados estuvieron presentes para despedir a Fr. Vincent.