Giuseppe Pollichino, a la edad de 78 años, el 25 de abril de 2022 emprendió el vuelo al cielo desde nuestro convento Jesús Ecce Homo de Calvaruso. El día 26, sus restos mortales fueron reunidos en la Capilla de la Confesión del Santuario de Jesús Ecce Homo, y el 27 se celebraron solemnemente los funerales. Presidió el Ministro Provincial, Fr. Massimo Cucinotta, rodeado de numerosos hermanos de la Provincia, sacerdotes del clero diocesano, postulantes y fieles del santuario. En la tarde del mismo día, su último traslado terrenal, fue enterrado en el cementerio de Sciacca (Ag) y sepultado en la capilla del cementerio de los Hermanos de la Provincia.
Giuseppe nació en Chiusa Sclafani (Pa) el 12.02.1944, hijo de Bartolo y Giammalva Maria Anna. Fue bautizado una semana después, el 19 de febrero.
Tras el periodo de prueba, comenzó su noviciado en Calvaruso, que terminó con la profesión temporal el 4.10.1963. Hizo sus votos solemnes en el convento de San Calogero en Sciacca el 1.11.1966.
Fue ordenado sacerdote en la catedral de Palermo por el obispo Francesco Carpino el 12.07.1970.
Realizó sus estudios de formación humana, religiosa, franciscana y sacerdotal en Calvaruso y en Sciacca sus estudios medios; sus estudios teológicos en Palma de Mallorca (España), en Siracusa y en Messina con los Padres Capuchinos y en el Instituto Santo Tomás de los Padres Salesianos.
Comenzó su misión sacerdotal con los cientos y cientos de jóvenes que asistían a nuestro Colegio Santa María en Siracusa. En la Congregación Provincial de 1972 fue trasladado a Calvaruso con el cargo de ecónomo. En octubre de 1974 se trasladó al Santuario de San Calogero en Sciacca con el mismo cargo de ecónomo. En la Congregación de 1980 fue nombrado Prior del convento de San Calogero. Fue reconfirmado Prior en 1984. El 10 de agosto de 1987 fue nombrado administrador parroquial de San Calogero. En la Congregación Provincial de 1988 fue nombrado ecónomo de la casa. En 1992 fue trasladado al convento de Corleone como ecónomo y vicepárroco. En 1993 se incorporó a la sede de Messina. De 1994 a 2003 se desplazó a diferentes conventos llevando su aportación allí donde se requería para casos especiales y la salud de los hermanos. En 2004 volvió a Sciacca, a la comunidad de San Calogero, como vicario parroquial. En junio de 2012, fue trasladado de San Calogero al convento de Santa Caterina a Chiaia en Nápoles, hasta enero de 2016: a partir de esta fecha, se trasladó a Calvaruso, hasta su muerte.
De los diversos traslados que se produjeron a lo largo de su vida religiosa, aceptados con serenidad y a la manera franciscana, surge la fisonomía de este religioso: humilde, sencillo y servicial, ofreciendo su ayuda allí donde se requería su presencia. Y en todas partes dejó un buen recuerdo. Aceptó las enfermedades que le sobrevinieron durante su peregrinaje terrenal y especialmente esta última que le llevó a la muerte, que abrazó con mucha serenidad.